Tengo que reconocer que durante los últimos años he estado más lejos que cerca de compartir o celebrar las tradiciones de mi localidad natal, pero no hace mucho se ha despertado en mí cierto interés por curiosear y aprender, especialmente sobre mi entorno más cercano y aún así desconocido. Identidad le llaman algunos. Otros dicen que en el momento en el que creemos que lo sabemos todo o dejamos de aprender, estamos perdidos.
En cuestión de una semana he podido asistir a dos conferencias realizadas a pocos metros de mi casa, y de las cuales no habría tenido constancia de su celebración si no fuera por las redes sociales o por avisos de última hora. Estas conferencias han sido enmarcadas dentro de los actos previos a la Semana Santa y organizadas por las cofradías de Nuestro Padre Jesús de Nazareno y del Santísimo Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de los Dolores, de Daimiel (Ciudad Real).
En cuestión de una semana he podido asistir a dos conferencias realizadas a pocos metros de mi casa, y de las cuales no habría tenido constancia de su celebración si no fuera por las redes sociales o por avisos de última hora. Estas conferencias han sido enmarcadas dentro de los actos previos a la Semana Santa y organizadas por las cofradías de Nuestro Padre Jesús de Nazareno y del Santísimo Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de los Dolores, de Daimiel (Ciudad Real).
La primera tuvo lugar el sábado 15 de marzo con el título "El Nazareno de Daimiel. Patrones iconográficos y referentes artísticos para su estudio" en la que José Alberto Fernández Sánchez, Historiador del Arte, mostró a los presentes diferentes aspectos de la iconografía de Jesús de Nazareno de un gran número de cofradías repartidas por toda la geografía española, centrándose finalmente en la figura daimieleña, de la cual se conserva solo la cabeza tras la Guerra Civil. Hasta el momento no existían, ni existen, datos sobre su autor, aunque se ha atribuido a la escuela del escultor barroco Francisco Salzillo. El ponente tras realizar un detallado estudio comparativo de diferentes imágenes, concluyó la conferencia atribuyendo la obra al escultor italiano Santiago Baglietto (s. XVIII), afincado en Murcia. Una conferencia interesante, pero quizás extensa para los menos conocedores de aspectos más técnicos en imaginería y su iconografía. El ponente demostró poseer grandes conocimientos sobre este ámbito artístico, pero que a pesar del evidente parecido en los rasgos que le llevaron a concluir el estudio, a día de hoy, sigue sin existir ningún tipo de documento que garantice la autoría de esta obra emblemática para la Semana Santa daimieleña.
La segunda conferencia se realizó el pasado sábado 22 de marzo y fue titulada "La Semana Santa durante la II República en Ciudad Real. El caso de Daimiel". Juan Francisco Prado Sánchez-Cambronero nos mostró y desmitificó, mediante datos y fotografías procedentes de fuentes hemerográficas de la época, el hecho de que estas celebraciones siguieron teniendo lugar durante este periodo histórico, a pesar de que cada municipio ciudarrealeño tuvo sus particularidades, siendo especialmente conflictivos los pueblos con mayor número de habitantes, como el caso de Daimiel, Manzanares o Campo de Criptana. Gran labor de un Historiador del Arte que con gran humildad nos mostró su punto de vista y aportó datos objetivos e incidió sobre la necesidad de entender las distintas ideologías que estaban siempre detrás de la prensa y que a pesar de contradecirse entre ellas, exponían sus ideologías de manera muy clara. El autor, entre sus aportaciones, realizó un breve inciso sobre la necesidad de un estudio en profundidad de las bases sociales de las cofradías, algo que a día de hoy era totalmente desconocido para mí y que en el caso de Daimiel, se basaba en los gremios. "Los Blancos" (Stmo. Cristo de la Expiración) eran comerciantes, "Los Moraos" (Jesús de Nazareno) estaban vinculados al campo, algo que totalmente encaja en mi caso particular, ya que mis antecesores estaban vinculados a la agricultura y la tradición familiar nos une también a esta última cofradía.
Es destacable y admirable la labor de estos dos investigadores. Es también necesario destacar que existe un gran camino por hacer en el ámbito de la investigación científica en el campo de la Historia y la Historia del Arte, ya sea en al ámbito local o vinculado a otros ámbitos geográficos comarcales, regionales o nacionales. Mi más sincera enhorabuena a estos dos grandes trabajos de investigación. Espero con ganas sus próximas aportaciones y estudios.
Muchos éxitos.
http://www.moraosdaimiel.org/actualidad/item/315-resultado-de-la-conferencia-ofrecida-por-d-jos%C3%A9-alberto-fern%C3%A1ndez-s%C3%A1nchez-llamada-el-nazareno-de-daimiel-patrones-iconogr%C3%A1ficos-y-referentes-art%C3%ADsticos-para-su-estudio
https://www.facebook.com/115221245188312/photos/a.146173928759710.36465.115221245188312/696194640424300/?type=1&theater
La segunda conferencia se realizó el pasado sábado 22 de marzo y fue titulada "La Semana Santa durante la II República en Ciudad Real. El caso de Daimiel". Juan Francisco Prado Sánchez-Cambronero nos mostró y desmitificó, mediante datos y fotografías procedentes de fuentes hemerográficas de la época, el hecho de que estas celebraciones siguieron teniendo lugar durante este periodo histórico, a pesar de que cada municipio ciudarrealeño tuvo sus particularidades, siendo especialmente conflictivos los pueblos con mayor número de habitantes, como el caso de Daimiel, Manzanares o Campo de Criptana. Gran labor de un Historiador del Arte que con gran humildad nos mostró su punto de vista y aportó datos objetivos e incidió sobre la necesidad de entender las distintas ideologías que estaban siempre detrás de la prensa y que a pesar de contradecirse entre ellas, exponían sus ideologías de manera muy clara. El autor, entre sus aportaciones, realizó un breve inciso sobre la necesidad de un estudio en profundidad de las bases sociales de las cofradías, algo que a día de hoy era totalmente desconocido para mí y que en el caso de Daimiel, se basaba en los gremios. "Los Blancos" (Stmo. Cristo de la Expiración) eran comerciantes, "Los Moraos" (Jesús de Nazareno) estaban vinculados al campo, algo que totalmente encaja en mi caso particular, ya que mis antecesores estaban vinculados a la agricultura y la tradición familiar nos une también a esta última cofradía.
Es destacable y admirable la labor de estos dos investigadores. Es también necesario destacar que existe un gran camino por hacer en el ámbito de la investigación científica en el campo de la Historia y la Historia del Arte, ya sea en al ámbito local o vinculado a otros ámbitos geográficos comarcales, regionales o nacionales. Mi más sincera enhorabuena a estos dos grandes trabajos de investigación. Espero con ganas sus próximas aportaciones y estudios.
Muchos éxitos.
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